Descubre en qué consiste el marketing emocional

Nos encontramos en una época donde la competencia entre las empresas es cada vez mayor. Mismos productos y mismos servicios son comercializados por infinidad de negocios. Ante esta situación, lo único que se puede hacer es diseñar estrategias con las que se consiga marcar la diferencia, con la que se logre destacar. Una forma de conseguirlo es mediante el marketing emocional.

Las empresas y marcas deben conectar con la audiencia. La mejor forma de llegar a ellos es a través de su lado más emocional. En otras palabras, las empresas y marcas deben sacar su lado más humano y personal para conectar con sus clientes. De esta forma lograrán diferenciarse de la competencia ya que añadirán valor a sus productos y servicios. Por tanto, no solo comercializarán, sino que también estarán transmitiendo un estilo de vida, unos valores.

El objetivo del marketing emocional es diseñar una estrategia donde se logre una relación afectiva entre la marca y el consumidor. Al fin y al cabo, la emoción es la que nos impulsa a comprar. Una imagen, un sonido, una frase… puede ser el detonante para adquirir o no el producto. De hecho, si una marca es capaz de sacar a la luz nuestros sentimientos (reír, llorar…), terminaremos por comprar. Esto lo hacen mucho las tiendas de moda y de deporte. Por ejemplo, los anuncios de marcas deportivas siempre se centran en la motivación, en superarnos, en transmitir que nada es imposible.

¿Quieres que tu campaña de marketing sea más emocional? Desde all for web te damos algunas pautas para lograrlo.

Trucos para un marketing emocional

• Vinculo entre marca y consumidor. Los consumidores viven experiencias al igual que las marcas ya que estas lo hacen a través de sus clientes. Gracias a la comunicación bidireccional, tanto las marcas como los consumidores están en el mismo nivel. A través de las redes sociales, reseñas… las empresas sabrán qué buscan los consumidores, qué necesidades tienen. Esto lo tendrán en cuenta a la hora de elaborar sus productos o servicios. Así las necesidades de los clientes estarán satisfechas.

• Transmitir emociones. Marca la diferencia creando contenidos que incluyan experiencias, sentimientos y emociones. La mejor forma de lograrlo es explicando cómo tus productos pueden mejorar su vida. En este sentido, puedes hacer publicaciones de sus características, ventajas y de sus usos. Por ejemplo, las marcas cosméticas en verano siempre transmiten un mensaje de diversión y descanso a la hora de promocionar sus protectores solares. Transmiten un estilo de vida. El objetivo es que los usuarios se identifiquen con esa historia, con ese estilo de vida. Por tanto, hay que tener muy claro cuál es tu público potencial.

• Humaniza tu marca. Diseñar una estrategia de marketing emocional no es tan fácil como se piensa. Lo primero que debe tener la marca es una filosofía y una vez que la tiene interiorizada, podrá transmitirla y comunicarla a sus consumidores. Por ejemplo, cada vez vemos más marcas que apuestan por productos y servicios respetuosos con el medio ambiente. También vemos como apuestan por un estilo más saludable: una buena alimentación, ejercicio físico, una vida más tranquila… Los consumidores están demandando cada vez más estos valores.